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miércoles, 6 de marzo de 2013



EXAMEN ESCRITO 



Este tipo de examen es el más común. En él las ideas y respuestas quedan plasmadas en papel. Se cuenta con más tiempo para responder que en el examen oral, o cuando menos se puede pensar con mayor detenimiento antes de contestar, borrar y corregir.

En estos exámenes hay que cuidar la redacción y la ortografía, además de la claridad con que se exponen las ideas. Hay de distintos tipos:

Opción múltiple
Las preguntas vienen con dos o más posibles respuestas, de las cuales sólo una es la correcta. Las demás suelen estar planeadas para parecer correctas y generar algo de confusión a la hora de responderlo. De hecho el nombre coloquial e irónico de estos exámenes es “confusión múltiple”.

•Ventajas. Cada pregunta tiene consigo la respuesta correcta y sólo hay que reconocerla. La calificación del examen es más objetiva.
•Inconvenientes. Las respuestas pueden estar redactadas de manera que sea difícil discernir cuál es la correcta. Con frecuencia estos exámenes se aplican en poco tiempo y hay que responderlos deprisa.
•Requisitos. Buen manejo del tema y capacidad para comprender las diferencias entre las respuestas propuestas. Agilidad mental.
•Preparación. En los repasos hay que centrarse en comprender los temas, para poder distinguir las respuestas correctas sin caer en trampas.
•Recomendaciones. Leer con mucha atención tanto las preguntas como las respuestas, localizando las palabras clave. Sirve poner mucha atención a los calificativos, como adverbios y adjetivos. Por ejemplo, los muy generales y absolutos (todo, nada, siempre...) suelen ser falsos, incorrectos o no los mejores. Cuando no sea claro cuál es la respuesta correcta, puede descubrirse por eliminación, es decir, descartar las que se sabe que son incorrectas hasta descubrir la válida. Con frecuencia las preguntas mismas incluyen claves sobre las respuestas.
Preguntas abiertas
Es una lista de preguntas a las que los estudiantes tienen que dar una respuesta explicando, describiendo, ejemplificando y dando argumentos, según sea el caso. Es importante contestar lo que se pregunta; es decir, si se pide definir se debe dar una definición, si se piden ejemplos se deben dar ejemplos… Es muy común que se responda lo que no se pregunta y, por lo general, las respuestas deben ser más o menos breves.

•Ventajas. Es el examen más común y estar familiarizados con la técnica da mayor tranquilidad y seguridad.
•Inconvenientes. Es frecuente confundir el enfoque de las preguntas, y hay a quienes sintetizar bien en el espacio disponible o redactar claramente las respuestas les es difícil.
•Requisitos. Capacidad de síntesis, capacidad de relacionar conceptos, memoria, buena redacción y dominar la materia.
•Preparación. Al repasar sirve tener presentes las actividades hechas en clase y los ejercicios realizados; las preguntas pueden ser muy similares. También hay que recordar los temas en los que el profesor hizo énfasis y poner atención a las partes destacadas de los textos usados en clase. Una buena idea es tratar de anticipar qué preguntas pueden venir en el examen y pensar en las respuestas.
•Recomendaciones. Leer detenidamente las preguntas, encontrar palabras claves y asegurarse de que se entendió el sentido. Dosificar el tiempo y planificar para contestar todo el examen; contestar primero las preguntas que se dominen mejor puede ayudar. Contestar exactamente lo que se pide, respetando el espacio disponible. Dedicar un tiempo final para releer y corregir.

1 comentario:

  1. Aunque tengamos muchas formas de hacer una evaluación, el éxamen sigue siendo un parámetro o indicador de darnos cuenta si los alumnos tienen al menos conocimiento de los conceptos que manejamos... Claro que para que sea un buen examen y tengamos buenos resultados debemos preparalo muy bien...

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